El camino hacia la sentencia no fue sencillo. En un primer momento, la fiscalía y la defensa habían llegado a un acuerdo tras la confesión de Costich, pero un tribunal colegiado declaró nulo ese acuerdo y ordenó volver a la etapa de control de acusación.
Finalmente, un tribunal de impugnación ratificó la validez del acuerdo y ordenó realizar nuevamente la audiencia de cesura, lo que permitió avanzar hacia la condena definitiva.
Actualmente, Federico Costich permanece detenido y deberá cumplir la pena impuesta por la Justicia neuquina.