Capitanich abordó también la relación entre democracia y corporaciones, “se trata de debatir la tensión entre democracia social y democracia formal. La democracia social tiene que tener un clivaje político. Y ese clivaje político tiene que ver con una capacidad de acumulación de poder político y social, con la capacidad de movimientos sociales y organizaciones”.
Además, aseguró que “sin confrontación no hay distribución, y para eso se necesita masa crítica, fortaleza política y capacidad de construcción en el marco de una correlación de fuerzas”.
“Nosotros desde el peronismo entendemos que la verdadera democracia es aquella en la que el gobierno hace lo que el pueblo quiere y defiende un solo interés, el del pueblo”, remarcó. Y llamó a “ser capaces de reconstruir en esencia la representación legítima y la voluntad popular para lo que Cristina denomina el Estado Democrático Constitucional”, sintetizó.