El episodio conmocionó a la comunidad cuando Ramiro Rotelo, de 49 años, padre del atacante, fue hallado sin vida en el comedor de su casa. El hombre recibió un disparo a quemarropa en el pecho y no presentaba signos vitales al momento de la llegada de la Policía. Rotelo era ingeniero químico y había ocupado cargos gerenciales en diversas empresas, incluyendo BASF y TotalFlex.
Rut Semeszczuk, madre del joven y víctima del ataque, logró escapar herida al recibir un disparo en el abdomen. La mujer, de 48 años, es médica forense y traumatóloga ortopedista, con una destacada trayectoria profesional en el Sanatorio Dr. Julio Méndez y la Defensoría General de la Nación. Pese a las graves circunstancias, se encuentra fuera de peligro.
La hija menor del matrimonio, de 8 años, fue encontrada con una lesión superficial provocada por el roce de una bala. La niña fue hallada por efectivos policiales a dos casas de distancia y se encuentra estable.
Tras disparar contra su familia, el adolescente intentó quitarse la vida en el baño de la planta superior con un arma de fuego. Fue trasladado al Instituto Argentino de Diagnóstico, pero las graves lesiones provocaron su fallecimiento este lunes.