El policía aclaró que "en ningún momento" vio a una nena y que, en caso de haber advertido su presencia, "la hubiera tomado y sacado del lugar".
Sin embargo, el juez Ramos, en otro párrafo de su fallo, remarcó que "no hay motivo para dudar del testimonio de la querellante", ya que "las imágenes corroboran férreamente sus dichos".
"Contrariamente, el descargo del imputado resulta inverosímil, no solo resulta llamativo que no hubiera visto a la niña, aún más las imágenes delatan que apuntó directamente a ella y a su madre sin reparo alguno y con toda intención disparó el gas", indica la resolución.