Otro de los apuntados es Gastón Hernández. La delicada situación económica de San Lorenzo facilitaría la salida de su capitán, un jugador que Boca ya buscó en anteriores mercados. La intención es sumarlo para reforzar la zaga central y generar competencia interna, especialmente para Lautaro Di Lollo, en un puesto que Riquelme considera clave.
Además, la idea de la dirigencia es sumar entre cuatro y cinco refuerzos. Alan Lescano interesa como volante creativo, aunque todavía no hay negociaciones formales. Para el puesto de centrodelantero, en carpeta figuran Miguel Borja y Alexis Cuello, aunque ninguno es prioridad por el momento. En cuanto a nombres rutilantes, la ilusión por Paulo Dybala se mantiene. Sin embargo, en Boca saben que, de darse, su llegada recién podría concretarse a mediados de año, cuando finalice su contrato con la Roma.
Las bajas confirmadas y los jugadores con chances de irse
En el capítulo salidas, ya hay tres confirmadas. Frank Fabra, Cristian Lema e Ignacio Miramón dejaron el club tras la finalización de sus contratos. El colombiano Fabra regresó a su país luego de 10 años en Boca y, si bien fue sondeado por Atlético Nacional, aún no definió su futuro.
Por Lema hubo consultas desde el fútbol argentino, aunque sin ofertas concretas, mientras que Miramón deberá regresar al Lille de Francia tras finalizar su préstamo. Gimnasia intentó repatriarlo, pero su contrato resulta inalcanzable para el club platense.
La postura de Boca es clara: ningún jugador es intransferible. En ese marco, Milton Giménez interesa en Racing y Lucas Blondel es seguido por Argentinos Juniors, Huracán y Tigre. También podría haber movimientos por Miguel Merentiel, pretendido desde México por clubes como América y Monterrey.
Por último, Ander Herrera deberá definir si continúa su carrera durante 2026 o si decide ponerle punto final a su etapa como futbolista profesional. Mientras tanto, en Boca el mercado ya está en marcha y promete ser uno de los más movidos de los últimos años.