Su llegada también era avalada por Federico Sturzenegger, que dio aviso a las ONG viales como Luchemos por la Vida de la llegada del flamante titular de la ANSV.
Pero las fotos que tenía en sus redes junto a funcionarios kirchneristas fueron la perdición para Dapena. Quien se enteró de su pasado fue Patricia Bullrich, la ministra de Seguridad que si bien no tiene a la ANSV bajo su órbita, es una guardiana celosa del antikirchnerismo.
Patricia llamó a Caputo enfurecida por el nombramiento de Dapena. Luego de un griterío, el ministro de Economía decidió que mejor que una guerra con la candidata del gobierno en la Capital, era echar a un funcionario asumido un día antes.